Toda la familia marista, estudiantes, profesorado, hermanos, obras sociales, trabajadores, catequistas, monitores, animadores y familias, preocupadas por la persistencia de conflictos y la proliferación de la violencia, de conductas de intolerancia en nuestras sociedades y en diversas partes del mundo, así como por la existencia del terrorismo y la guerra, verdaderos azotes de la humanidad; Preocupados por la extensión de la intolerancia hacia las personas diferentes, sobre la que se asientan infinitas conductas de discriminación, odio y violencia que dañan la dignidad de la persona, su libertad e igualdad de derechos que son inherentes a todos…